Higiene: cada vez que usa sus brochas de maquillaje, recogen todo lo que está en su cara, es decir, aceite, células muertas de la piel, polvo y cualquier otra cosa que se adhiera a su piel.Esta es una receta para el desastre (o mejor dicho, el acné).Cada vez que usas un cepillo sucio, te limpias esta repugnante combinación por toda la cara y, como resultado, obstruyes los poros.
Bacterias y virus: lo crea o no, tanto los virus como las bacterias viven dentro de nuestros cepillos.Cuando te empolvas la nariz con un cepillo sucio, ¡existe una gran posibilidad de que te resfríes!Las bacterias, por otro lado, pueden causar algunos problemas como conjuntivitis e infecciones por estafilococos.Viven mucho tiempo en las cerdas, así que ten cuidado.
Productos de maquillaje más duraderos: las brochas sucias también son un caldo de cultivo para las bacterias.Esto no solo es terrible para tu rostro, sino que también es malo para tus productos de maquillaje.Transferir todas estas bacterias a sus productos los contamina, y lo que debería haberle durado un año se echará a perder en unos meses.Además, si cuidas mejor las brochas, ¡te durarán años!
Mantén las brochas suaves: las brochas sucias se vuelven más abrasivas y secas a medida que se apelmazan más con el producto y la suciedad de la cara.A su vez, esto irrita la piel.La limpieza regular de tus brochas las mantiene lo suficientemente suaves como para no dañar tu rostro.Cuanto más los lave, más durará su inversión.
Mejor aplicación del color: las brochas sucias tampoco son efectivas para aplicar el color con precisión.Con maquillaje viejo apelmazado en tus brochas, no puedes conseguir el look que buscas.Ya sea que esté buscando un contorno mezclado naturalmente o una sombra de ojos dramática.
Hora de publicación: 11-feb-2022